las palomas y el pan

Las palomas vienen y se comen los panes

Botan las canastas

Aletean y dejan plumas en la panera

Migajas regadas por el mostrador

A veces cae el pan picoteado al suelo y es raro

Verlo ahí comido

Devorado desde un punto muy pequeño pero hasta el fondo, un picoteo profundo

Y el pan ahí tirado, un pan seco ya, muerto por  una herida brutal.

así acababa mi 2008

Me gustaría ser más superficial. Tomar y dejar tomar y dejar. Sin pensar en los heridos. Atropellar sin pararme a mirar, sin ayudar.  Egoísta de verdad.   

Me gustaría ser todavía más chica. Poder gritar cuando me plazca, hacer berrinches, patalear, contar con que alguien siempre va venir a cargarme y llevarme a comer un helado. Que alguien siempre me va poner la mano sobre la cabeza para hacerme dormir cuando no puedo.

Me gustaría ser más valiente y asumir que me están usando cuando lo están haciendo. Que estoy siendo tomada por tonta. Dejar de hacerme la tonta. Sería bueno quitarme esta sonrisa idiota y fruncir el ceño, juntar mis cejas al centro y levantar mi labio superior como verdadera fiera temible. Ser de movimientos rápidos, pasar desapercibida. No ser vista. Invisible, para no tener que esconderme nunca. Me gustaría poder convencerme a mí misma de la verdad de maneras más simples. Me gustaría tener una linterna para ver en la oscuridad de mis ideas a veces, conocer todas mis cuevas, todos mis atajos. Señalizar mi mente para no perderme Ser más dura. Más fuerte. Más tajante. Firme. Poderosa

 Ser una heroína. Salvarme de los malos. O mejor aun, ser la heroína más malvada de todas. Una verdadera paradoja voladora vistiendo un traje increíble y demoledor.

Vamos a inventar una historia de amor como ninguna. Una historia de dos personas tan enamoradas que dé asco. Arcadas. Rabia. Pereza. Un par de personas tan estúpidamente enamoradas que provoque atropellarlos sin pensarlo.

 

de regreso

le di muchas vueltas, porque así hago a veces, le doy la redonda vuelta a las cosas para asegurarme que el lugar donde estaba no era tan malo, incluso el mejor.
entonces esto es un regreso sobre traspapelado firme.
con comienzos de año una renovadita de blog. 
vamos a ver qué nos trae el 2009.
Siempre con los que sufren

Un amigo me envía este artículo de El Mundo sobre las "mentiras" que la comunidad internacional asume como ciertas en Palestina.

http://www.elmundo.es/elmundo/2008/12/30/internacional/1230654642.html

El artículo es tendencioso, sí, pero no por mentir sino por hablar sólo de los sufrimientos de los palestinos, y no hablar de los sufrimientos israelíes. Deberían haber hablado también de lo que es vivir en la frontera con un país que no deja de enviarte regalitos en forma de cohetes, o temer durante toda tu vida una invasión combinada de todos tus países vecinos (ya lo intentaron en la Guerra de los Seis Días en 1967 ).

Nada de eso disculpa hoy a Israel, y su actitud me obliga a estar 1000 x 1000 con el pueblo palestino. No porque me caigan mejor que los israelíes, sino porque hoy sólo hay palestinos que mueren e israelíes que matan. Estaría con los israelíes si los agredidos fueran ellos. Sin duda. No se me han olvidado los coches-bomba en Tel Aviv ni los suicidas que estallaban dentro de los autobuses. Pero esta situación hace mucho tiempo que no se produce en Israel.

Los portavoces del gobierno de Israel dicen que la mayoría de sus víctimas son policías y funcionarios, como si ello les hiciera culpables de algo. No son militares, ni terroristas, sino civiles como tú y como yo ¿Qué es esto? ¿volvemos a la Edad Media? ¿pasamos a cuchillo a todos los habitantes de una ciudad porque sus gobernantes nos han provocado?

La triste y fría realidad: Novecientos palestinos muertos en una semana. Por contra, seis israelíes muertos, cuatro de ellos por "fuego amigo". Que digan lo que quieran pero esto se llama "masacre", y a los que están dirigiendo, se les llama "asesinos".
Queda lo más difícil

qué luto eso de elegir regalos con poca pasta y con mucha obligación. Si además los agasajados te importan poco o no son agradecidos, no te digo cómo se queda el cuerpo cada día 6 de enero ...

Y es que la compra navideña debe ser uno de los trabajos peor pagados del año. Correr, buscar, pensar, calcular, y todo en un día chicos. Hoy he estado en varios centros comerciales y la experiencia da para un estudio antropológico completo. La suerte es que terminé con lo mío rapidito y me pude dedicar a observar al personal. Por un momento pensé que en lugar de observador iba a ser la cobaya, pero no, encontré lo que buscaba y me senté a mirar.


He visto estrés, pero del bueno, del que inunda de adrenalina los pasillos. He visto discutir a parejas, resoplar a las abuelas ante los escaparates, hasta los críos iban a toda pastilla. Había gente sentada con la cara tan cansada como si hubieran terminado el maratón hace dos minutos. El cine vacío, la FNAC llena. El parking diminuto para albergar tanto coche. Atascos a la entrada y a la salida. Y caras felices también, las de aquéllos que llevaban, por fin, todas las bolsas a cuestas. Sin dinero pero con el objetivo cumplido: un regalo para mamá, papá, los hermanillos, los cuñaos, los sobrinos, ... qué dispendio tan mal disfrutado.

Ahora queda lo chungo, el día después, la apertura masiva. ¿Les gustarán mis regalos, me gustarán los suyos? Un ojo en sus reacciones y otro en romper el papel que lleva mi nombre. Por favor, que al menos salga bien lo primero, que me se me jode el día. Bueno, pase lo que pase, siempre quedará el Roscón, y un día sin ir a la ofi, que no es poco.

Y los Reyes Magos, por Palestina, ¿no?. Allí sí están realmente jodidos. Menos mal que Nazareth queda en el lado israelí ...