Más bosque para la península

Según el Informe la Situación de los Bosques Españoles, elaborado por la Sociedad Española de Ciencias Forestales (SEFC), nuestra masa forestal crece al un ritmo del 1,5% anual. Hablamos de casi 300 millones de nuevos "bebés de árbol" cada año. No tengo datos del número de árboles que desaparecen, pero seguro que cada vez son menos, ya sea por la disminución de las talas para hacer leña, ya por el mayor control de incendios llevado a cabo los últimos años.

Lo que se observa a simple vista, es que donde antes había cultivos y ganado, hoy la Naturaleza trabaja para devolver al campo su aspecto primigenio. En nuestra montaña segoviana fresnos, robles, chopos y encinas recuperan terreno. Y el crecimiento de la sabina en la zona de Prádena-Casla-Sigueruelo es realmente espectacular.

Respecto a las repoblaciones, la mayor parte de las veces se hacen con poca cabeza. He visto cómo se replantan algunas riberas de los ríos madrileños con cierto sentido y planificación, pero la repoblaciones de la montaña siguen haciéndose con poco orden y sospecho que sin contar con estudios de viabilidad ecológica. Pinares y eucaliptos siguen siendo los favoritos, aprovechando su valor económico, y son menores las repoblaciones de hayedos o castañares. En la foto se puede ver un aislado acebo junto al tradicional modo de repoblación de pinos "en terraza"

También la repoblación sin control trae daños colaterales. El otro día un paisano del pueblo dijo que la causa de la actual escasez de arroyos y fuentes podría ser la repoblación del pinar que se llevó a cabo hace 30-40 años. Al convertir la ladera en una sucesión de terrazas se destruyeron los torrentes y las "mini-cuencas" que alimentaban cada fuente. La reflexión tiene sentido.