El verano es la época ideal del año para descubrirse hasta los pies. Sin embargo, para los diabéticos el calor representa ciertos cuidados especiales. ¡Toma nota!
Durante la época más calurosa, los diabéticos requieren cuidados adicionales, ya que las altas temperaturas pueden provocar deshidratación y resequedad de la piel, en especial la de los pies. En el caso de los pacientes insulinodependientes, la absorción de insulina aumenta, dependiendo del lugar de administración y de la actividad física, por lo que debe reajustarse la dosis diaria.
Cuidados en verano
Es necesario que adquieras nuevos cuidados durante la época calurosa en el trabajo, en casa o en cualquier viaje que realices. La clave para atravesar esta época sin descontroles está en mantener una hidratación adecuada y el cuidado de la piel con el uso constante de bloqueador solar.
Al armar tu maleta
Un viaje provoca muchas emociones y representa mayores retos, ya que debes equiparte con las medidas necesarias para mantener bajo control tu diabetes. Toma en cuenta los siguientes consejos antes de empacar tu maleta:
- Mantente bien hidratado, de preferencia con agua pura. Si tienes alguna restricción médica al respecto, consulta con tu doctor qué debes tomar en horas de mucho calor.
- El bloqueador solar es indispensable para proteger tu piel, aplícate protector tres veces al día durante las horas de mayor concentración solar (9, 11 y 14 horas).
- Evita exponerte al sol directo por periodos prolongados.
- Controla el nivel de la glucosa de manera constante.
- Evita caminar descalzo, sobretodo en la arena, ya que los desechos en la playa pueden causar alguna herida, aunque menor, que se convierta en una infección a mayor escala.
- Utiliza calzado cómodo y ventilado. Si vas a estar en una piscina, debes usar calzado especial para agua. Evita zapatos fabricados con plástico o materiales sintéticos.
- Lleva varios pares de zapatos y medias especiales.
- Evita usar ropa muy apretada o húmeda.
- Revisa de manera cuidadosa y constante tus pies. Una diabetes mal cuidada provoca una neuropatía diabética que disminuye la sensibilidad del cuerpo, en especial de los pies, que pueden lastimarse sin que te percates de la herida.
- Porta un botiquín de primeros auxilios.
- Si eres paciente insulinodependiente debes mantener tus dosis de insulina en un lugar adecuado. No la expongas al sol directo.