a la Gran Bretaña

una semana, ¡una semana!, sólo una semanita queda para dejar atrás este mundo cruel (sólo el laboral, se entiende) y lanzarme a las procelosas e ignotas aguas de las vacaciones veraniegas. Buf, voy mal con tanta metáfora, tengo que dejar de beber aguardiente a diario ...

A lo que iba, que me voy de vacaciones el miércoles que viene. Este año toca Inglaterra, así que allá va un representante de la tribu zorruna, hacia la Pérfida Albión.
Donde fracasó la Armada, triunfarán los zorros segovianos. Quince días relacionándome con los aborígenes. Intentaré aprender su ininteligible jerga y sus peligrosas costumbres. De hecho, me han recomendado que lo mejor es imitar sus costumbres primero, que después de cuatro pintas en ayunas seguro que me entiendo perfectamente con mis compañeros de barra.

Itinerario: Devon, Cornualles, Gales, Londres, probablemente Cambridge y vuelta "pa" España. Y como no podía ser de otra manera, el irredento ultrasociable que os escribe ya ha cerrado cenas con amigos varios, algunos de ellos residentes, alguno que viene también de las Españas, y hasta uno de allende los mares con el que me veo obligado a quedar ¡en otro país! Vaya tela.

Bueno, ya os contaré si salgo indemne de la excursión o pueden conmigo los elementos. Lo que sí es seguro es que volveré a tiempo de disfrutar las fiestas de Sotosalbos. ¡¡ Allí nos vemos !!
"Deformación" universitaria II
"... decíamos ayer", parafraseando a Fray Luis, que ir a la universidad es perder el tiempo. Es una sensación que siempre tuve, ya desde primero de carrera cuando comprobé que era mucho más fácil aprobar ese curso que cualquiera de los cuatro anteriores ( BUP y COU ).

Ya, ya sé que los que me conocéis, sobre todos los ingenieros, estaréis pensando, "qué jodío, que hubiera estudiado Aeronáutica". Bien, es posible que unas carreras sean más fáciles que otras, pero lo que sí es cierto es que en ninguna se deja uno los cuernos. En todas podríamos haber trabajado más. Dicho esto, a modo de autocrítica, me explicaré ¿por qué creo que perdí el tiempo? pues porque no aprendí nada que no hubiera aprendido con un poco de disciplina y leyendo libros. Creo además que los años pasados en la facultad no me hicieron más listo o menos tonto.

Puedo decir que "aquéllos maravillosos años" me dieron muchas cosas, sobre todo amigos y risas, pero en el plano de formación, cero. Aprendí más en los empleos temporales con los que pagaba mis gastos.
Sin ningún género de dudas, mi puesto de trabajo actual lo pueden desarrollar con éxito otros compañeros que no han ido a la Universidad.
¿Qué decir de los "títulos"? papel mojado, nada más. Salvo para determinados puestos públicos u oficios regulados por colegios profesionales, nadie te pide el impreso oficial donde dice que eres economista, ingeniero, abogado o filólogo.

Bah, paparruchas!, diría el pobre Mr. Scrooge. La universidad esta sobrevalorada. Creo que hablar idiomas, ser resolutivo, saber escuchar, saber mantener la mente fría y tener ganas de trabajar son virtudes más importantes que el conocimiento memorístico de determinada materia. Y creo también que, mientras la Universidad no cambie y se olvide de cátedras y honores, los chavales seguirán saliendo tan burros o tan brillantes como eran el día que se matricularon en primero. Y lo que es peor, tan engañados como nos sentimos nosotros y nuestros padres en su día, cuando nos tragamos la trola de que con un diploma bajo el brazo ganaríamos el oro y el moro en unos pocos años.

Entrevista a Rigoberta Menchú, por el caso de violaciones a derechos humanos en Honduras


El trabajo de Comunicarte sigue siendo el dar a conocer los hechos que atenten contra la dignidad y la libertad de los ciudadanos centroamericanos y del mundo.
"Deformación" universitaria

Parece ser que, por obra y gracia de la adaptación a Bolonia, la mayoría de los estudiantes que este año comiencen sus carreras universitarias tendrán que cambiar al "plan nuevo" el curso que viene.

Sin discutir el plan de marras, del que no conozco una coma, sí diré que comenzar la universidad sabiendo que tú primer curso va a quedar obsoleto en unos meses me parece una tontería mayúscula. Por tanto, y por si algún aspirante a universitario me lee, le voy a dar unas alternativas:

1. pasar un año cojonudo de fiesta en fiesta y obtener un diplomado en asuntos del sexo opuesto en los jardines de la Uni.

2. hacer lo mismo que en el punto 1 pero en el extranjero, preferentemente en un lugar donde pueda aprender inglés con fluidez.

3. probar a matricularse en la carrera que siempre quisiste hacer. Da igual que "no tenga salida". Total, para perder el curso igualmente, al menos te das el gustazo de hacerlo en algo para lo que tienes vocación.

Después de ver esta foto ..., sí, está claro, recomiendo firmemente la opción 2. Inglaterra puede ser un buen destino, ja, ja.


Machada


Lo humano escasea, sobre la bici (pepino)se transforma, deja en evidencia lo ligero lo escaso, pone de moda lo supremo. 102 km 3146 m desnivel positivo. No, no es posible, pues frotate los ojos otra vez.....