Publicado el 18/07/2014 en 20minutos - Noticias en Español
EUROPA PRESS
- Una inyección de proteína FGF1 restablece el azúcar en sangre a un nivel saludable.
- El tratamiento también revierte la insensibilidad a la insulina, la causa fisiológica subyacente de la diabetes.
- Incluso a altas dosis, FGF1 no desencadena los efectos secundarios de algunos otros fármacos para la diabetes.
EUROPA PRESS. 18.07.2014 - 13:54h Una sola inyección de la proteína FGF1 es suficiente para restablecer los niveles de azúcar en la sangre a un nivel saludable durante más de dos días.
Es el descubrimiento, realizado en ratones por científicos del Instituto Salk (Estados Unidos) y que podría conducir a una nueva generación de medicamentos seguros y más eficaces para la diabetes. El equipo, cuyo estudio publica Nature, encontró que el tratamiento continuo con esta proteína no se limita a mantener el azúcar en la sangre bajo control sino que también revierte la insensibilidad a la insulina, la causa fisiológica subyacente de la diabetes. Igual de importante, el tratamiento de nuevo desarrollo no provoca efectos secundarios comunes en la mayoría de las terapias actuales para la diabetes.
"El control de la glucosa es un problema dominante en nuestra sociedad", dice Ronald M. Evans, director del Laboratorio de Expresión Genética de Salk y autor del artículo sobre este trabajo. "FGF1 ofrece un nuevo método para controlar la glucosa de una manera poderosa e inesperada", agrega este experto. La diabetes tipo 2, que puede ser provocada por el exceso de peso y la inactividad, se ha disparado en las últimas décadas. En estas personas, la glucosa se acumula en el torrente sanguíneo porque no hay suficiente insulina para controlar el azúcar o porque las células se han vuelto resistentes a la insulina, haciendo caso omiso de las señales de absorber el azúcar. Al ser una patología crónica, la diabetes puede causar problemas graves de salud y no tiene una cura concreta, sino que se controla, con diferentes niveles de éxito, a través de una terapia de combinación de dieta, ejercicio y medicamentos. En la actualidad, los fármacos para esta enfermedad se centran en aumentar los niveles de insulina y revertir la resistencia a la insulina mediante cambios en los niveles de expresión de genes para obtener menores niveles de glucosa en la sangre. Inesperadamente, los científicos del Instituto Salk vieron que los ratones que carecen del factor de crecimiento, llamado FGF1, desarrollan rápidamente la diabetes cuando llevan una dieta alta en grasas, un hallazgo que sugiere que FGF1 juega un papel clave en la gestión de los niveles de glucosa en sangre. Esto llevó a los investigadores a preguntarse si dar FGF1 extra a ratones diabéticos podría afectar a los síntomas de la enfermedad.
Así, el equipo de Evans inyectó dosis de FGF1 en roedores obesos con diabetes para evaluar el impacto potencial de la proteína en el metabolismo y se sorprendió al ver lo que sucedió: con que con una sola dosis, los niveles de azúcar en la sangre se redujeron rápidamente a niveles normales en todos los ratones diabéticos. Incluso a altas dosis, FGF1 no desencadena los efectos secundarios de algunos fármacos –desde un aumento de peso no deseado a peligrosos problemas del corazón y del hígado– ni provoca que los niveles de glucosa caigan a niveles peligrosamente bajos, un factor de riesgo asociado con muchos agentes reductores de la glucosa. En cambio, restaura la capacidad propia del cuerpo de regular de forma natural los niveles de insulina y azúcar en la sangre, manteniendo las cantidades de glucosa en un rango seguro, revertiendo efectivamente los principales síntomas de la diabetes. El mecanismo de FGF1 todavía no se entiende, pero el grupo de expertos que trabajan con Evans descubrió que la capacidad de la proteína para estimular el crecimiento es independiente de su efecto sobre la glucosa, con lo que la proteína está un paso más cerca de uso terapéutico.