Tranquilo majete

hoy he ido a la manifestación convocada por los sindicatos en Madrid en defensa de los derechos de los trabajadores. Cuatro gatos. Había más gente en el Bernabéu el domingo, y eso que durante la marcha no llovía. Ha sido una oportunidad desperdiciada para hacer ver al Gobierno que la gente está preocupada por su futuro.

Es una pena comprobar día a día que la gente no utiliza ya la libertad de expresión política. Durante muchos años no estuvo permitido hablar, y ahora que podemos, sólo rajamos en el bar. No salimos a la calle, muchos ya ni votamos ... en fin, así nos va la vida.

Viendo el percal, espero tener salud suficiente que me permita ahorrar dinerito y asegurar mi vejez antes de los 67 años, porque me faltan un montón de años aún para llegar a esa meta y por el camino seguro que a algún otro político se le ocurre incrementar aún más la cifra hasta los 68, 69, 70 ...

Qué envidia me dan los obispos que son capaces de convocar a millones de personas. Esos sí que saben.