¡¡Sí, sí, sí, nos vamos a París!!!

eso cantábamos en mi primera visita a la Ciudad de las Luces allá por el año 2.000. Dicen que en la primera ocasión que se va a esta fantástica ciudad se encuentra el amor. Yo encontré la Copa de Europa (años más tarde volví, ahora sí con pareja de carne y hueso, je, je).

Pues eso, que los próximos días podréis encontrame paseando por alguna de estas calles ...