la sesión del día

Me dijo que las palabras me asustan. Que tengo que amistarme con ellas: Novio, enamorado, pareja.

Yo tiemblo y pataleo y ella dice que basta. Que por temor a la palabra pierdo de vista el concepto y entonces saco el asunto de mi vida y más o menos que, dice ella, me ando perdiendo de cosas buenas.

Novio: hombre que está obligado a hacer lo que yo quiero. Siempre.

Enamorado: chico de 15 años que hace más o menos de todo para tener sexo únicamente.

Pareja: situación agobiante y alterante en la que dos personas están encerradas para siempre en un cuarto blanco de dos por dos metros.

Eso es lo que pienso de cada una de esas palabras.

Lo que yo imagino cuando ella me pregunta qué quiero de una relación es un jardín gigante, con playa al final. Un avión al norte, un auto al sur. Caballos al este y al oeste unas buenas zapatillas para salir corriendo por si todo eso no ha sido suficiente.

No me parece tan descabellado. Mientras tanto ella dice que me va curar. Vamos a ver quién gana.

encontrado, casi olvidado. rescatado.

sabediosdecuándoesesto. peroes.

1. 

En cunclillas. Respirando, mira al suelo, cuenta 3, cuenta 2 y uno.

Levanta la mirada, fija el objetivo y sale, como una bala lanzada con la mano, una piedra, pesada pero avanzando. El aire casi no mueve su pelo, el esfuerzo se refleja en su rostro, de lejos no se entiende, si no hay viento en contra, si no hay obstáculos, por qué le cuesta tanto. Y allá va, avanza un poco, la roca pierde fuerza, le gana el peso, la bala sin propulsión no llega muy lejos, y enfrenta a una pared que lo detiene. De cara contra el muro el personaje se rompe un diente y se magulla el maxilar.

Cae de espaldas, el cielo se acerca y se aleja, se dice a sí mismo que estuvo bien el intento. Tarde o temprano derribará el muro.


2.

Vienes a buscar duendes aquí. Crees que están debajo de mi cama, esperando a que te asomes, levantes la sábana y les sonrías para que ellos te hagan una demostración de magia pura y verdadera. Te asombren, te hagan creer.

Vienes a buscarlo aquí porque no te cuesta trabajo, porque es fácil, porque siempre va estar ahí y nada va cambiar. La cama lo va acurrucar, lo va abrigar y él va estar cómodo y aguardando. El duende, que tiene la cara que quieres, es del tamaño que más se acerca a lo que crees, sonríe cuando lo deseas, y es tan parte de ti como tu nariz o tus orejas.

Yo no soy nadie para decirte si existen o no. Y no es una crisis de ilusión, no es que mis sueños se estén rompiendo, no es que esté cambiando lo colores por el blanco, el negro y el gris. Pero este duende en particular, mi duende, sólo aparece para mí. Si lo quieres ver vas a tener que decirlo, vas a tener que hacer el pedido con los ojos cerrados y las manos extendidas. Vas a tener que regalarme una flor.



lo que hicimos con eso

Hicimos un bulto con eso, lo metimos en una bolsa con nudo y allá se fue. Pudimos haberlo tirado al mar pero decidimos que se fuera pa la tierra.

Está enterrado debajo de un montón de hojas húmedas polvorientas. Pegajosas. Está todo bien despedido y a punto de ser recordado como pasado.

Se dijo una pequeña bendición, eso sí. 

Los objetivos del milenio

Cuando la crisis golpea, lo primero que hacemos es apretarnos el cinturón, y prepararnos para ahorrar. Nos dedicamos a prescindir de chucherías varias y eliminamos los gastos superfluos. Lamentablemente, uno de esos gastos prescindibles suele ser la “limosna”, esa pequeña, e insisto en el calificativo “pequeña”, parte de nuestro patrimonio que algunos, e insisto también en eso de “algunos” ofrecen a quien carece de medios para alimentarse, vestirse o educarse. Ahora, con la excusa de la crisis, si esa contribución se redujera, la esperanza que lanzamos a África o Sudamérica en forma de maná limosnero se acabaría y a mucha gente no le quedaría nada, ni siquiera esperanza.

Algunos dirán que mi miedo es injustificado, pero razones hay de sobra para mosquearse. Hoy hemos celebrado la manifestación anual convocada en Madrid por Rebélate contra la Pobreza y como siempre hemos acudido cuatro gatos (bueno esta vez alguno más, lo mismo éramos cinco). Y es que el “buenismo” no está de moda. Oigo declaraciones rimbombantes de vez en cuando, pero luego cada uno vuelve a su casa y se olvida de los que agonizan fuera de nuestras fronteras. Algo parecido a lo que les pasó a los líderes mundiales hace ya casi 10 años, en Septiembre de 2.000. Entonces, los representantes de 189 países lanzaron en Nueva York una declaración que contenía los ocho Objetivos de Desarrollo del Milenio. A saber:

Objetivo 1: Erradicar la pobreza extrema y el hambre.
Objetivo 2: Lograr la enseñanza primaria universal.
Objetivo 3: Promover la igualdad entre los géneros y la autonomía de la mujer.
Objetivo 4: Reducir la mortalidad infantil.
Objetivo 5: Mejorar la salud materna
Objetivo 6: Combatir el VIH/SIDA, el paludismo y otras enfermedades.
Objetivo 7: Garantizar la sostenibilidad del medio ambiente.
Objetivo 8: Fomentar una asociación mundial para el desarrollo.


Quizá los llamaron así no por haberse enunciado en el año que finalizó el milenio, sino porque iban a tardar al menos 1000 años más en hacerse realidad. Cosas de políticos. Seguro que ese día cenaron bien.

Castiñeiro cut








En las proximidades de Villalba necesitaban de nuestra destreza...Un castaño situado entre dos lineas, una de alumbrado y la otra de telefono, no dejaban forma de poder apear el ejemplar, sin bajar cada rama controlada a polipasto y freno. Nos encaramamos al árbol a las 5:00 pm a las 8:30 pm terminado. En turnos de hora y media + - nos repartimos el trabajo en tierra y el aereo....Somos VICEN-TREE, COYO-TREE, MIRO-TREE, como los tres mosqueteros cuando trabajamos juntos nos hacemos llamar CUT-TREE, suena "cutre" pero si lo "sajonizas" suena muxo mejor....para mejorarlo cuasi refinitivo TREE-PAR.....viiiiiiiin