Cosas de humanos

hace ya tiempo que nos enseñaron en biología que todas las personas cagan y mean. Sean reyes, obispos, modelos, jueces o actores, los humanos sufren enfermedades, se ponen tristes, se ríen, se excitan, se cabrean.

¡Qué cosas! un día en la universidad un chaval llegó alarmado a la cafetería: "tíos, estaba en los baños y ha entrado el catedrático A. , se ha metido en el servicio y no veas que pedos se tiraba". En aquel momento me alegré de que mi compañero por fin se enterara de que los catedráticos completan correctamente el tracto digestivo, y hoy me alegro de ver que el REY DE ESPAÑA por fin sale del armario y se cabrea en público.



No voy a entrar en las razones del cabreo en cuestión, pues seguramente erraría. La mayoría de la gente creerá que quiso callar al bocón venezolano, otros que estaba estresado pensando que hoy se haría pública la separación de su primogénita, y otros que le parece poco la multa de 3.000€ que han impuesto los jueces a los dibujantes de "El Jueves". Para mí lo realmente importante es que por fin la Casa Real baja de sus altares de sangre azul y se comportan como personas normales, personas que se enervan cuando están enfadados, que se separan cuando no queda amor y que van al servicio cuando tienen ganas.